El Banco de Venezuela (BDV), a nueve años de su nacionalización, se posicionó en el primer lugar de la banca nacional y lidera los principales indicadores financieros del país.
“Vamos a recuperar el Banco de Venezuela para ponerlo al servicio de los venezolanos. Nos hace mucha falta un banco de esa magnitud”, afirmó el líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez, al anunciar en 2008 el interés del Estado en comprar y nacionalizar esta entidad bancaria.
El Gobierno nacional invirtió 2.593 millones de bolívares para adquirir la institución, cifra que se recuperó en 223,6%.
Después de su nacionalización que se concretó el 3 de julio de 2009, la institución también evidenció un crecimiento exponencial de la cartera de clientes al pasar de 4 a más de 13,5 millones.
Cuando el Estado venezolano asumió su administración, el banco se encontraba en el cuarto lugar en el otorgamiento de créditos, mientras que en la actualidad lidera el otorgamiento de créditos para personas naturales y sectores productivos. Por lo que destacan las carteras que impulsan las actividades turísticas, agroalimentarias, manufactureras y comerciales.
En el transcurso de 2018, el BDV ha otorgado más de 236 billones de bolívares, de los cuales el 90% está dirigido al sector productivo, manufacturero e industrial.
Revolución tecnológica
El BDV ha fortalecido su plataforma tecnológica para que sea eficiente y segura para sus clientes, por lo que cuenta con más de 6 millones de usuarios registrados en sus servicios de banca electrónica.
Un hito en esta revolución tecnológica ocurrió en 2013, cuando el banco lanzó BDVMóvil, un canal para que los clientes realicen sus operaciones desde dispositivos inalámbricos con acceso a internet.
Luego, en 2015, el BDV implantó el nuevo servidor principal IBM Z13, que cuenta con un sistema de cómputo que se encarga de resguardar y procesar todo tipo de intermediación financiera. La Institución fue la primera de América Latina en adquirir este tipo de servidor de última generación para tramitar grandes volúmenes de datos.
En 2017, la entidad presentó BiopagoBD, un servicio innovador que blinda la seguridad de las operaciones de compra mediante el uso de las huellas digitales. Esta herramienta permite que los usuarios cancelen sus consumos a través de la tecnología biométrica sin necesidad de usar sus tarjetas.
Adicionalmente, el BDV cuenta con dos centros de procesamiento de datos (CDP), el principal que opera en la Torre Servicios Centrales, en Caracas, y otro alterno ubicado en Barquisimeto (Lara), que se activa en situaciones de emergencia para garantizar la continuidad de las operaciones en taquillas, puntos de venta y banca por internet.
En la actualidad, el Banco de Venezuela trabaja en el lanzamiento de su nueva plataforma de la banca electrónica que mejorará el servicio digital a través de su página web: http://www.bancodevenezuela.com/.
La modernización permitirá agilizar el servicio electrónico por el alto número de transacciones diarias, informó el presidente de la institución, José Morales.
“Con este plan de crecimiento en su primera fase la nueva Clavenet, que se llamará BDV en Línea, descongestionará en 60% la página actual y mejorará el servicio”, aseguró en declaraciones recientes.
Con información de Minci
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