Winston Churchill es una de las personalidad históricas más interpretadas en el cine. Actores como Brendan Gleeson (Into The Storm), Albert Finney (The Gathering Storm) y John Lightgow (The Crown) han destacado en sus caracterizaciones.
Eso hasta que llegó Gary Oldman en Las horas más oscuras (Darkest Hour), un trabajo que según los expertos marca un antes y un después en la interpretación del célebre político. De hecho, ya son varios los que dan por seguro que el Oscar al Mejor actor tiene su nombre, publicó Ultimas Noticias.
Dirigida por Joe Wright (Atonement, Pride & Prejudice), Las horas más oscuras narra el breve periodo entre la designación de Churchill como primer ministro y la caída de Francia en la Segunda Guerra Mundial, una época en la que Reino Unido tuvo que decidir entre seguir en combate sin apoyo, o aceptar los términos de Hitler para un supuesto tratado de paz.
En este panorama, algo patriotero por momentos, Churchill representa a un primer ministro combativo que se enfrenta a su hora más oscura para reunir a su nación y luchar por los ideales y la libertad.
Oldman, quien luce irreconocible, es la columna vertebral del filme con un trabajo impecable en lo que gestos corporales, vocalización y energía se refiere.
Destaca, además, el trabajo de maquillaje ideado por el escultor Kazuhiro Tsuji, que le representaba al actor entre 3 y 4 horas sólo de caracterización antes de cada rodaje, y que incluía la prótesis facial y capilar y un molde especial para engrosar su figura. Ya está en cartelera en Europa.
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