Pacientes renales de la Unidad de Diálisis Acarigua, en Portuguesa, denunciaron durante una protesta un brote de hepatitis B y C en dicho centro de salud.
Los pacientes exigieron este lunes, a las autoridades atender esta emergencia que sufren en la Unidad de Diálisis Acarigua; ente adscrito al Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (Ivss).
Brote de hepatitis en Unidad de Diálisis Acarigua
Una usuaria del centro de salud identificada como Marialber Martínez, manifestó que en la unidad se contabilizan 16 casos y la cifra pudiera aumentar, porque hay pacientes esperando por resultados de análisis médicos y otros que no han podido hacérselos por falta de recursos económicos.
La concentración tuvo lugar en la avenida Alianza del centro de Acarigua, a las afueras de la unidad. Martínez añadió que el brote transcurre desde hace 20 días, aproximadamente. Detalló que temen que estos pacientes se contagiaron en una de las máquinas de hemodiálisis que comparten.
«Lo que nosotros compartimos son las máquinas de hemodiálisis; y desde hace más de dos semanas, día a día, sale un paciente contagiado con hepatitis. Las autoridades de la unidad legan que son los pacientes los que desde hace más de un año; no entregan exámenes médicos; sin embargo, es desde hace menos de un mes que se registra esta situación y, además, no contamos con un médico en este servicio que nos evalúe y dé las indicaciones para exámenes, tratamiento o nos diga los pasos a seguir», explicó Martínez.
Desinfección inadecuada
Exhortó que la falta de hipoclorito, interrumpe la desinfección de las máquinas, y añadió que este químico no ha sido dotado desde hace un mes por el Seguro Social.
«La desinfección no es confiable. Hay un brote grande y si estuviesen desinfectando adecuadamente no tendríamos esta situación tan alarmante para nosotros. Desde que nos quedamos sin hipoclorito, entre todos los pacientes pusimos dinero y compramos vinagre para limpiar las máquinas y que no fuese solo con agua. Pero ya sabemos que no ha funcionado».
La vocera del grupo señaló que debido al colapso por el número de pacientes que hay en la unidad, 100 en total, desde el lunes 4 de abril, las autoridades ordenaron a los pacientes negativos compartir máquinas con los positivos a otras enfermedades, pese al brote que se registra.
«El plan que han diseñado es que en el primer y segundo turno dialicen pacientes negativos, y en el tercer turno a los positivos, y cuando salgan estos últimos, van a lavar las máquinas con agua caliente para desinfectar, pero para nosotros no es confiable y tememos que empeore nuestra salud que ya es frágil», expresó Martínez.
Aguas negras
Los pacientes también argumentaron que, a un lado de la sala de pacientes positivos, existe un desbordamiento de aguas negras, lo que representa un foco de contaminación.
«También los muebles de las máquinas de esa área están demasiado deteriorados, rotos, llenos de sangre y con ácaros. Todo esto perjudica más nuestra salud. Nosotros pedimos al alcalde de Páez, Rafael Torrealba; al gobernador Primitivo Cedeño y a la Defensoría del Pueblo, a quienes ya se informó de la situación, a que ayuden a buscar una solución a este grave problema que se está registrando».
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