Los comerciantes informales del mercado de Las Pulgas, avenida Libertador, San Felipe, y Callejón de los Pobres, en Maracaibo, mostraron su descontento por plan de desalojo del Casco Central de la ciudad. Arremetieron contra los órganos de seguridad el Estado.
El enfrentamiento obligó a cerrar la avenida Libertador, generando un caos en casi todo el casco central de Maracaibo que desde el pasado 26 de septiembre inició un proceso de intervención y depuración de los espacios públicos.
Efectivos de la Guardia Nacional repelieron con bombas lacrimógenas a los manifestantes quienes tomaron el elevado de Delicias con Sabaneta como ‘bastión’.
“Queremos el derecho de trabajar, tenemos que alimentar a nuestras familias”, era la consigna de los pocos protestantes que declararon a PANORAMA, cuando descansaban de los gases lacrimógenos.
De acuerdo con los comerciantes ellos no tienen como pagar los impuestos que está imponiendo la municipalidad que, en el caso de los buhoneros del “callejón de los pobres” tenían plazo hasta hoy para pagar BsS 400 mil de impuesto.
La mayoría de los comercios permanecían cerrados ante los hechos de violencia, de hecho, clientes y transeúntes se encerraron en los pocos negocios que abrieron para `protegerse de lo que es una batalla campal. Se espera un pronunciamiento del alcalde y el gobernador sobre el tema.
Con información de Panorama
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