Para el senador Chileno, José Miguel Insulza insistir en la idea de anticipar unas elecciones en Venezuela no es la solución; ya que consideró que no es viable y tampoco evitarían el colapso del país.
El exsecretario general de la OEA rechazó categóricamente la idea de una intervención militar en Venezuela. Además, advirtió que la única posibilidad es impulsar un gobierno de transición para reconstruir a la nación.
“El problema de Venezuela es que es un país completamente desarticulado. Seguir pidiendo elecciones en dos meses, que renuncie Maduro y (después) hacemos otra elección por dos meses más, no funciona”, subrayó.
Enfatizó que Maduro no admite la crisis en el país y hace como si no pasara nada; pese a la destrucción de la economía.
Así mismo, puntualizó que Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional no puede hacerse cargo de nada.
Por ende, destacó Insulza que Latinoamérica debe encontrar una solución sin tomar bandera; y tampoco sin buscar líderes providenciales en Venezuela y sin una salida electoral forzada al actual gobernante, necesariamente.
“Se busca una negociación seria para resolver la crisis de Venezuela. Pero es difícil hacerlo con Maduro, que promete y no cumple. El fin puede ser que se vaya Maduro, pero no el principio”, declaró.
Por lo cual, el ex-representante de la OEA aseveró que la única salida es el diálogo que se está buscando en Noruega.
Por su parte, Benedicte Bull, directora de la Red Noruega de Investigación sobre América Latina, coincidió con Insulza en que vencer a Maduro por la vía electoral, ahora es imposible y que los venezolanos quieren un diálogo aunque no haya una salida pronta.
“Coincido en que si uno organizara elecciones en Venezuela mañana, sin primero renovar el Consejo Electoral, sin restablecer la confianza en todo el sistema electoral, sería un fracaso”, opinó.
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