La quema de Roma ideada por Nerón, quien culpó a los cristianos del siniestro para no levantar sospechas del crimen, es una histórica fake news (noticia falsa). Ese es el juicio del abogado y máster en Gerencia Política, Oscar Arnal, quien indicó que el objetivo de estas publicaciones es la desinformación deliberada o el engaño.
El profesor de la Cátedra de Régimen Jurídico de la Comunicación de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), y de Estudios Internacionales en la Universidad Central de Venezuela (UCV) explicó que el problema de los bulos es descubrirlos y si bien regresa a su emisor, provocan demasiado daño ademas de confundir a un conjunto de electores.
También recalcó la necesidad de imponer la verdad, apelar al código de ética del periodismo, a la buena formación profesional y realzar el papel de la academia. Igualmente asegurarse que los medios como El Universal, que se consideran una institución, mantengan la línea de la veracidad.
“Se estima que en el mundo hay más de 88 millones de cuentas falsas en Facebook y otras tantas en Instagram y Twitter, también hay usuarios que actúan con pseudónimo, indicó Arnal. Además sostuvo que aproximadamente la mitad de la población en Europa y Estados Unidos se informa a través de las redes sociales.
“La clave de este fenómeno mundial, que evidentemente toca a Venezuela, es que cualquiera emite un mensaje perverso con una intención ideológica o politiquera, que pervierte la opinión pública”, precisó Arnal.
Arnal: Los fanáticos se encargan de publicar campañas de desprestigio
Las campañas de desprestigio son principalmente ejecutadas por fanáticos, aseguró Arnal. Explicó como en Periscope, una aplicación para transmitir videos en tiempo real, insultan al emisor de un mensaje, en conjunto con la difamación e injuria.
“Hasta Whatsapp se cuida de la viralización de las fake news, desarrollan mecanismos para evitar la propagación de las noticias falsas. Ahora en los mensajes que se vuelven a transmitir aparece la palabra reenviado, para dejar claro que la persona que lo envía no es la creadora del contenido”, manifestó Arnal.
Asimismo, insistió en verificar el origen de la información, pues los medios con trayectoria generalmente investigan el origen del contenido antes de publicarlo.
Por otra parte, Arnal señaló que hay herramientas para determinar la fuente de una noticia, su credibilidad y el medio que difunde la información.
“Se debe tener ojeriza y chequear todo lo que se transmite por las redes sociales, para no hacer el papel de tontos útiles”, puntualizó.
Con información de El Universal
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