Las teorías de conspiración del SIDA nos pueden servir de referencia histórica para abordar con mayor lucidez el impacto de la pandemia actual. La historia tiende a moverse en círculos. Las conspiraciones paranoicas vuelven una y otra vez a construir patrañas de rebuscadas explicaciones para la realidad.
Una de las teorías de conspiración del SIDA más populares es la que sostenía que esta era una enfermedad fruto de un castigo divino por la homosexualidad. Las prácticas sexuales consideradas inmorales habían desencadenado el padecimiento.
Puedes leer: OPS: Junio es el mes crucial para frenar pandemia en Latinoamérica
De los 40.000 nuevos casos de VIH diagnosticados en Estados Unidos durante 2017, el 70% fueron hombres bisexuales u homosexuales. Esta cifra les servía muy bien a aquellos que veían la mano de Dios actuando en forma iracunda.
Aunque esta fue una creencia especialmente extendida en los ochenta y noventa, sigue sobreviviendo en nuestra era. Casi uno de cada seis estadounidenses cree que el VIH es un castigo de Dios.
Conspiración del SIDA
Otra célebre instancia de teorías de conspiración del SIDA involucra a la CIA. Los resultados de una investigación publicada en el Journal of the American Medical Association Internal Medicine son muy reveladores. La mitad de los estadounidenses encuestados sospechaba en 2013 que el VIH fue una creación intencionada por parte de la CIA.
En 1986, tres científicos de distintos países afirmaban que el VIH había sido creado en un laboratorio. Este planteamiento no tuvo recorrido científico posterior pero dio alas a la teoría de la agencia de inteligencia.
Algunas publicaciones online todavía hoy recogen esta leyenda, ya desmentida, pues se ubicó el origen del VIH en la República Democrática del Congo. Allí comenzaría en los años veinte del siglo pasado la mutación de un virus similar que afectaba a los simios, empezando su expansión mundial a partir de los años sesenta.
Una variante de la teoría de conspiración anterior especificaba también que el VIH fue creado por el Pentágono estadounidense en 1972. Este formaba parte de un proyecto llamado MK-NAOMI y fue ejecutado con el propósito de reducir la población de drogadictos.
Puedes leer: Conoce el calendario de abastecimiento de combustible para junio
Tras cuatro décadas no se ha llegado a una vacuna efectiva contra el VIH, un virus que mata a 700.000 personas cada año. Mientras tanto hemos aprendido a convivir con el virus. Igualmente nos hemos acostumbrado a vivir con la presencia de teorías conspirativas con la diferencia que su poder de influencia es preocupantemente mayor.
