Puerto Carayaca ubicada al oeste del estado Vargas, fue una de las zonas de la entidad que activó las alarmas el fin de semana tras un deslave que causó asombro en la población, esto como consecuencia de las fuertes lluvias ocurridas el pasado domingo 14 de octubre.
El pasado 19 de octubre, la fuerza de la naturaleza hizo de las suyas: piedras, troncos y tierra, arrasaron con todo el pueblo. La playa del lugar quedó inexistente, los pescadores del lugar perdieron sus botes. Según información oficial, más de 30 casas quedaron tapiadas y centenares de familias perdieron sus enseres.
El hecho dejó un solo fallecido, que quedó identificado como Yhon Aurelino Velásquez Rodríguez, de 37 años de edad, quien, según habitantes el sector, fue arrastrado por la tierra en el sector Zapateral y hallado 70 horas después del deslave por Yolismar Ortega, quien detalló que su hogar quedó tapiado por completo y avisó a funcionarios de defensa civil sobre el hallazgo.
Los servicios de agua y energía eléctrica quedaron suspendidos a causa del derrumbe y deslave. Postes de electricidad fueron derribados por la naturaleza. El internet y cobertura telefónica quedó temporalmente fuera de servicio, dejando al pueblo incomunicado a nivel de telecomunicaciones.
Habitantes en medio del desamparo y silencio
Los habitantes de Puerto Carayaca señalan que la tragedia que viven no es reseñada por los principales noticieros del país y tampoco se han acercado periodistas para documentar el desastre y el drama que viven, manifestando sentirse silenciados y desamparados.
Según reseña el portal Caraota Digital, son los mismos habitantes quienes se encargan de alimentar y brindar hospedaje a los obreros que se encargan de retirar las piedras, escombros y troncos de las vías.
Asimismo, aprovecharon la presencia de este único medio digital ante esta situación, para exigirle al gobernador de Vargas, Jorge Luis García Carneiro, a que cumpla con su deber como autoridad. Denunciaron que es poca la ayuda que han recibido por parte del Gobierno regional.
En vista de la indiferencia gubernamental, claman por ayuda humanitaria, señalaron que necesitan con carácter de urgencia agua potable, comida, ropa y medicinas para tratar las enfermedades que han contraído algunos pobladores, entre las que destacan, diarrea, fiebre, escabiosis, entre otras patologías causadas por el estado insalubre del pueblo.
Lamentaron que desde el Gobierno nacional no tengan la verdadera voluntad para solucionar el caos que atraviesan. Desamparados y en incertidumbre se mantienen mientras el silencio y la indiferencia reinan en plena temporada de lluvias.
