Donald Trump, presidente estadounidense sorprendió ante la ONU al anunciar por primera vez su preferencia por la creación de un Estado palestino que coexista con Israel, generando cierta perplejidad entre israelíes y palestinos.
Por su parte, los dirigentes interesados, el presidente de la Autoridad Palestina Mahmud Abas y el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, hablarán este jueves ante la Asamblea general de la ONU en Nueva York.
Sin embargo, tras haber tomado clara distancia con el principio de una solución llamada de “dos Estados”, defendida por sus predecesores desde al menos 2001, Trump parece corregir el tiro en momentos en que se celebra esta Asamblea general.
Trump durante un encuentro con Netanyahu, afirmó “me gusta la solución de dos Estados” Aunque es “un poco más difícil (…) funciona mejor porque cada uno gobierna por su lado” agregó más tarde.
La medida de dos Estados supondría la creación de un Estado palestino independiente coexistiendo en paz con Israel, y es aceptada por gran parte de la comunidad internacional –ONU, Liga Árabe, Unión europea– para resolver uno de los más viejos conflictos del planeta.
La iniciativa surgió tras los acuerdos de Oslo, pero un cuarto de siglo después de esos acuerdos las perspectivas de solución al conflicto son muy lejanas. Israelíes y palestinos ya ni siquiera negocian la paz.
Gaza puede “explotar”
Según la ONU La violencia se perpetúa y Gaza puede “explotar en cualquier momento”, Además, en Cisjordania prosigue la colonización israelí y la Autoridad palestina está cada vez más desacreditada ante su propia opinión y ante sus rivales islamistas del Hamás, que controlan desde 2007 la Franja de Gaza, y se resisten a reconocer a Israel.
Por otra parte, Israel tiene el gobierno más derechista de su historia y muchos de sus integrantes no quieren oír hablar de un Estado palestino y abogan por anexar parte de Cisjordania.
Es importante mencionar que el presidente Abas congeló las relaciones con la administración Trump tras el reconocimiento, en 2017 por Estados Unidos, de Jerusalén como capital de Israel. Abas considera a Washington abiertamente proisraelí y por tanto descalificado para ejercer como mediador en el conflicto.
Netanyahu también aceptó en 2009 la idea de una Estado palestino, de la que sin embargo parece alejarse en los últimos años.
Un “desastre”para Israel
Los expertos auguran que ante la ONU que Netanyahu insistirá más bien sobre el peligro que representa Irán.
El nacionalista religioso Naftali Bennett, afirmó que mientras su partido, el Hogar Judío, esté en el gobierno israelí, “no habrá Estado palestino”. “Ello significaría un desastre para Israel”, tuiteó Bennet.
En los últimos meses, Trump había preservado cierta ambigüedad sobre el conflicto israelo-palestino, al afirmar que se podían contemplar otras soluciones, como la de un único Estado.
Con información de Panorama
