La piña es una fruta maravillosa, y más allá de que nos encanta el sabor, son increíbles para la piel. Beber, comer y aplicar tópicamente jugo de piña de forma regular es una forma poderosa y comprobada de lograr una piel clara y radiante.
Las vitaminas en estas frutas incluyen vitamina A, vitamina C, betacaroteno, tiamina, vitamina B5 (ácido pantoténico), vitamina B6 y ácido fólico. Minerales como el potasio, cobre, manganeso, calcio, sodio y magnesio también se encuentran en las piñas.
Además, contiene la enzima bromalina que ayuda a eliminar células muertas, exfoliar el rostro y conseguir, así, una piel mucho más saludable y limpia. Gracias a sus nutrientes esta fruta también puede usarse para aclarar la piel, frenar la acción de los radicales libres y lucir un cutis perfecto.
Para la mascarilla de piña necesitarás:
2 rodajas de piña fresca
Un pedacito de la cáscara
Gotas de medio limón
1 cucharada de miel
1 cucharada de gel de aloe vera
Pon a hervir todos los ingredientes con excepción de la miel y el gel de aloe vera. Déjalo a fuego lento por al menos 20 minutos.
Una vez fresco, retira la concha de la piña y licúa muy bien hasta obtener una pasta semi líquida. Añade la miel y la sábila y revuelve bien.
Con la piel limpia, aplica la mezcla con un pincelito o brochita. Reposa por 15 minutos y retira con agua fría. ¡Listo! Repite la mascarilla cada 15 días y verás que tu piel queda tan perfecta y suave.
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