El director del Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya, Alexánder Guíntsburg, afirmó que los primeros voluntarios que probaron la vacuna rusa Sputnik V no contrajeron la infección provocada por el Covid-19 o presentaron problemas de salud.
Pese a resaltar que oficialmente no se les estaba monitoreando, Guíntsburg señaló que se mantenían en contacto, e indicó que “ninguno de ellos se resfrió o enfermó”.
Los primeros ensayos clínicos de Sputnik V comenzaron el 18 de junio y contaron con participación de 38 personas, quienes recibieron el alta el 15 y el 20 de julio.
Algunos de ellos presentaban reacciones posvacunales durante las primeras horas después de la inyección; como un ligero aumento de la temperatura y dolores de cabeza, que desaparecieron por sí solas durante el día. Los científicos afirmaron que todos desarrollaron inmunidad contra el Covid-19.
Vacuna Sputnik V
La vacuna utiliza la tecnología de adenovirus humano de dos vectores y se registró en Rusia el 11 de agosto.
El registro temprano permitió suministrarla a personas de los grupos de alto riesgo en medio de la pandemia. Para el 25 de agosto se supo que las autoridades sanitarias dieron luz verde para realizar las pruebas posteriores al registro de Sputnik V; y pasar a la fase 3 de los ensayos, con 40.000 participantes.
Los resultados de la investigación de la vacuna se publicaron en la revista The Lancet a principios de septiembre.
En la publicación se afirma además que el 100 % de los participantes desarrolló una respuesta inmunitaria humoral y celular estable durante las dos fases de los ensayos; mientras que el nivel de anticuerpos contra el SARS-CoV-2 en voluntarios vacunados resultó de 1,4 a 1,5 veces más alto que en los pacientes recuperados de covid-19.
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