La viruela fue considerada como la enfermedad más temida por la humanidad, pues todo aquel que la padeciera podía considerarse muerto.
Sólo en el siglo XX dejó regada una estela de 500 millones muertos. Se trató de una enfermedad infecciosa grave provocada por el virus Variola. A la última víctima a quien se le diagnosticó fue en Somalia en 1977 y tres años más tarde la Organización Mundial de la Salud (OMS) certificó la erradicación de la enfermedad en todo el planeta.
Los epidemiólogos la caracterizaron por su elevada tasa de mortalidad estimada en 30%. Para los bebés era letal. Los que sobrevivían quedaban ciegos y con marcadas cicatrices. El virus que se transmitía principalmente por la inhalación de las gotas que exhalaba por la nariz o boca una persona contagiada.
Puedes leer: Esquí con caballo, el deporte extremo del campo británico
Para los expertos sus síntomas incluían fiebre y fatiga. Sin embargo, la enfermedad producía erupciones en la piel que se transformaban en pústulas. Los sobrevivientes quedaban desfigurados. Para colmo la infección atacaba las córneas.
La viruela en acción
Hoy en medio de la pandemia del coronavirus se le recuerda como la única enfermedad en humanos que ha logrado ser erradicada.
“Fue un éxito formidable”, le dice a BBC Mundo el profesor Paul Fine, experto en epidemiología de enfermedades transmisibles de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres. “Ha habido éxitos enormes en salud pública, como la provisión de agua limpia, los antibióticos, y muchos otros. Pero este, sin duda, fue un tremendo triunfo”, acotó.
Para desaparecer la viruela de la faz de la tierra se pasó por varios niveles. Primero se logró mantenerla en un bajo nivel. Después la erradicaron de una parte del mundo, pero continuaba en otras regiones. Por último la borraron del mapa.
El sendero hacia su eliminación comenzó hace 200 años cuando el científico británico Edward Jenner desarrolló que la vacuna contra la viruela en 1796. Pronto la vacunación contra la pavorosa enfermedad comenzó a realizar en algunas naciones durante el siglo XIX hasta que en el siglo XX se trasladó a todos los países el orbe.
La sacaron de circulación
La vacunación contra la viruela se hizo rutina en muchos países durante el siglo XIX y para mediados del siglo XX ya se llevaba a cabo en todos los países del mundo.
En 1967, la OMS se propuso erradicar la enfermedad e inició una campaña global. Ese año los organismos sanitarios contabilizaron 2,7 millones de muertes. Hoy los médicos estiman que la erradicación de la viruela estuvo marcada por una vacuna muy eficaz.
Puedes leer: ¡Lamentable! Falleció el periodista carabobeño Alfredo Fermín
El lado más débil de la fatal enfermedad era visible. Todos los pacientes tenían los mismos síntomas. No había infecciones asintomáticas como el coronavirus. De manera fácil se localizaban a los pacientes y se aislaban. Y por último se encontraban a las personas con quien el paciente estuvo en contacto y se vacunaban.
Los médicos de manera lenta y efectiva limpiaban amplios sectores de la enfermedad. A ese plan lo llamaron de “búsqueda y contención”.
